Los hay que cumplen casi todos sus sueños. Por ejemplo, Pep Guardiola. O, por ejemplo, Rocío Pavón (Madrid, 1983). De groupie de Ella Baila Sola a componente del dúo, de presidenta de su clubs de fans a estrella del grupo que idolatraba, de aprendiz a cantante, del anonimato en la claca a protagonista.

Rocío, estudiante aventajada, y mucho, en el Conservatorio Maestro Barbieri (Madrid), donde por una hiperlaxitud en los dedos (imposibilidad de apretar fuerte con las yemas de las manos) se vio obligada a dejar el violín y abrazar el piano, la batería, la guitarra, cualquier instrumento musical, se convirtió rápidamente, en los 90, en la primera fan de Marta Botía y Marilia Casares, componentes del exitoso grupo Ella Baila Sola (EBS). Esta chica del madrileño barrio de Orcasitas perseguía a sus ídolos allí donde iban, sacrificando la semanada y lo que hiciese falta. "Llegué, casi, a formar parte de su caravana. Las visitaba en su camerino, compartía sus actuaciones y, cómo no, acabé siendo presidenta de su club de fans", explica Rocío. "Cuando ellas comprobaron que, en efecto, a mí no solo me gustaba su música, la manera que tenían de actuar en el escenario, su trayectoria, sino compartir con ellas algo más, no digo su vida pero sí algunas de sus inquietudes, la verdad es que se fueron abriendo a mí y compartí muchas de sus cosas aunque, eso sí, siempre con una cierta distancia".

No lo cuenta, pero llegó a cantar con ellas en innumerables ocasiones a oscuras, en solitario, a solas. A medida que avanzaba en su aprendizaje iba enviándoles las canciones a Marta y Marilia, que las recibían con gratitud y hasta retocaban algunos de sus compases. Algunas de esas piezas fueron compuestas por Rocío y el cantautor Diego Andrés.

Cuando en el 2001 Marta y Marilia se separaron, Rocío pensó que su sueño también había concluido. Hace pocos meses, Marta llamó a Marilia para saber si estaba interesada en volver a los escenarios. La respuesta fue rotunda: ni hablar. Y Marta, cómo no, pensó en su groupie favorita, en su segundo apellido. Y ahí están, triunfando con su nuevo disco, Despierta, y convirtiendo Ella Baila Sola en el mejor de los SMS, en un mensaje telefónico, en la abreviatura de moda: EBS. Jamás una fan llegó tan alto. O sí.