A Jaime Martínez-Bordiú no le han servido de nada las lágrimas que derramó en el juicio ni sus alegatos de inocencia. La jueza de Barcelona María Jesús Manzano le ha condenado a un año de prisión por haber maltratado y amenazado a la que fuera su novia, la modelo Ruth Martínez, durante su estancia en agosto del 2007 en un hotel de Mijas (Málaga). El nieto pequeño de Franco (en la foto) no será encarcelado porque no tiene antecedentes, pero no podrá, por ahora, acercarse a la mujer.

La sentencia detalla que el 21 de agosto Martínez-Bordiú, en el transcurso de una acalorada discusión, insultó a la que era su pareja, llamándola "zorra", y que cuando Ruth intentó salir de la habitación "la cogió de los brazos y la tiró sobre el sillón". El acusado también dio una patada a una silla y un ordenador impactó en la modelo. Ya en recepción, el nieto de Franco amenazó a su novia con la frase: "Has llamado a la policía. Como la hayas llamado te mato".

La jueza relata que el imputado negó los hechos, pero Ruth dio detalles sobre las vejaciones. E incide en que no hay rencor por parte de la denunciante, "sino todo lo contrario", pues no reclama indemnización.