Sabíamos cuál era la marca de su reloj y la del automóvil deportivo. El modelo de ordenador portátil y el del teléfono móvil. Las películas de James Bond son un descarado y potente vehículo para dar publicidad a una escogida selección de productos de moda. A esa lista se sumará, en el próximo filme, el nombre del sastre del agente 007. En su nueva aventura, cuyo estreno está previsto para el próximo mes de noviembre, el inglés Daniel Craig lucirá los trajes diseñados por Tom Ford.

El genio tejano que revolucionó Gucci se ha impuesto frente a la firma italiana Brioni, que llevaba 12 años vistiendo a Bond en la pantalla. El periódico The Times ofrecía ayer la exclusiva mundial, anunciando que "el nombre es Ford... Tom Ford". Su misión será darle un toque de distinción al musculoso Craig, cuya escena más memorable en Casino Royale, la última entrega de la saga, era aquella en la que el célebre espía salía del agua, con un bañador azul como única indumentaria. ¿Misión imposible?

Desde 1995, cuando el irlandés Pierce Brosnan se incorporó a la saga del superagente, los italianos de Brioni habían hecho a la medida sus trajes, sin ninguna publicidad. Poco antes del estreno de Casino Royale, sin embargo, quisieron aprovechar el tirón del filme sacando un esmoquin con el nombre de 007 en el forro.

La elección de Brioni fue cosa de Lindy Hemming, la persona a cargo del vestuario de todas las películas de la serie, desde Goldeneye en 1995. "Es importante saber elegir los trajes. Hay que garantizar que podrán verse durante años" sin que queden desfasados, señala Hemming. A su juicio, Timothy Dalton, un Bond fallido, se vestía como "un policía fuera de servicio". Hemming quiso para Brosnan "algo más moderno, más europeo, clásico y de excelente corte". Cuando el monumental Sean Connery, al que cualquier prenda le caía bien, protagonizó Dr. No, el director Terence Young no lo pensó tanto y decidió llevarle a su propio sastre, Anthony Sinclair, un clásico de la escuela de Savile Row. Hemming dijo a The Times que antes de decidirse por Brioni consultó varios diseñadores europeos, incluido Armani.

El próximo largometraje de Bond se titula Quantum of Solace y el tema musical correrá a cargo de la cantante Amy Winehouse. La pasada semana los productores descartaron las ruinas del Machu Pichu en Perú como escenario de algunas escenas del rodaje. La excusa oficial fue el mal tiempo que hacía en la zona, pero lo cierto es que la presencia en el lugar de los equipos de la película había despertado manifestaciones y protestas.