Situado en las antípodas de José Antonio Camacho y sus legendarios lamparones de transpiración axilar en el Mundial de Corea y Japón del 2002, el entrenador alemán Joachim Löw ha conquistado, sin discusión alguna, el título de seleccionador más elegante del Mundial de Suráfrica. Vestido por la diseñadora alemana Gabriele Strehle, creadora de la marca Strenesse, Löw, de 50 años, se lo está poniendo difícil a Pep Guardiola en su pugna por el cetro universal de la elegancia en los banquillos: el impactante jersey azul (foto) con cuello de pico y el impecable traje gris oscuro que ha vestido en todos los partidos del campeonato tienen la culpa.

El responsable de la selección que hoy se enfrentará a España en busca de un puesto en la final del Mundial desprende una prestancia poco habitual en los banquillos. Löw ya demostró ser un tipo con clase hace dos años en la Eurocopa de Suiza y Austria, cuando dirigió a la Mannschaft con una impecable combinación de camisa blanca entallada y pantalón negro, también de la marca Strenesse.