El rey Juan Carlos aterrizó ayer en un helicóptero pilotado por él mismo en la Isla del Rey, un enclave de 40.000 metros cuadrados situado en el centro del puerto de Mahón, en la ciudad de Menorca.

El Monarca español, acompañado del jefe de la Casa Real, Alberto Aza, respondió con esta visita privada a la invitación de la Fundación Hospital Illa del Rei donde fue recibido por su presidente y jefe del Estado Mayor del Ejército, el general Luis Alejandre, y por el alcalde de Mahón, Arturo Bagur. Juan Carlos saludó a los integrantes de la entidad, que llevan a cabo un proyecto de restauración del edificio del centro hospitalario, construido durante las dominaciones británicas de Menorca, en el siglo XVIII. La edificación está considerada un monumento histórico-artístico. Asimismo, se interesó por la complicada problemática de los amarres del Club Marítimo.