La pretensión de Telma Ortiz de prohibir a más de 50 medios de comunicación que tomen y publiquen fotos suyas a excepción de los actos oficiales es "inviable" jurídicamente. Así lo dictaminó ayer la jueza María Lourdes Pérez Padilla, que recalcó que la hermana de la princesa de Asturias es una persona con proyección pública porque asiste a ceremonias protocolarias. Por lo tanto, añadió la magistrada, los periodistas están facultados para tomar imágenes suyas siempre y cuando esté en un lugar abierto al público, según establece la ley de protección del honor, intimidad e imagen.

La magistrada del juzgado número 3 de Toledo --que escuchó los argumentos de ambas partes en la vista que se celebró el lunes-- tenía cinco días de plazo para emitir la resolución. Le han bastado tres para tumbar los argumentos de Telma Ortiz y su pareja, Enrique Martín Llop. Ambos viven en Toledo desde que nació su hija, en marzo. Antes, vivían en Filipinas, donde trabajaban como cooperantes.

El fallo destaca que Telma Ortiz nunca ha tenido problemas en salir en la prensa durante "largo tiempo", desde del noviazgo de su hermana con Felipe hasta que se quedó embarazada. Además, le reprocha que en su demanda alegue exclusivamente una vulneración del derecho a la imagen y no mencione su derecho a la intimidad y al honor. Los abogados de los más de 50 medios de comunicación denunciados aseguraron que la hermana de Letizia pretendía instaurar la "censura previa", prohibida en la ley. La jueza, sin embargo, niega la mayor e insiste en que cuando se limita un derecho porque se está cometiendo un abuso no hay censura previa.

Durante la vista, el abogado de Telma, Fernando Garrido, insistió en que sus clientes corren "peligro físico real" debido al "insoportable acoso" que sufren a manos de cámaras y fotógrafos. La jueza recalca que ninguna persona tiene que soportar ese calvario, pero recuerda que hay "otras vías penales" para denunciarlo. Por ejemplo, añade, si la hermana de Letizia es perseguida por periodistas, debería interponer una denuncia por conducción temeraria. En ese caso, la prensa no podría apelar a la libertad de información porque no está informando. El presidente de la Asociación de Prensa de Madrid, Fernando González Urbaneja, recordó a los periodistas que el derecho a informar va unido al de "respetar" a las personas.