La mala suerte parece rondar la grabación de la última película de Tom Cruise, Knight and Day , tanto en Austria como en España. El actor se incorporó ayer al rodaje con su compañera de reparto Cameron Diaz y, gracias a su pericia conduciendo una moto, evitó que fuera a mayores el accidente leve que sufrió uno de los corredores profesionales contratados para recrear un típico --al menos para los estadounidenses-- encierro pamplonica.

Se trataba de la misma escena de persecución que la pasada semana, durante su ensayo, provocó el pánico en la ciudad al escaparse siete toros mansos, que recorrieron varias calles de Cádiz hasta acabar en la playa de La Caleta. Un episodio que obligó al ayuntamiento a suspender el rodaje hasta que se presentara un plan de seguridad y que se incorporó con rapidez a las coplillas de las agrupaciones de Carnaval, que ya se encuentran ensayando.

Tras reorganizar el trabajo, y con las estrellas de Hollywood en tierras andaluzas, ayer fue uno de los mozos quien se accidentó cuando corría delante de los toros y chocó contra un muro. El joven, ataviado al estilo pamplonica, salió despedido y quedó tendido en el suelo, quejándose de dolor en una pierna. Mezclados entre las reses circulaban en moto los dos protagonistas, que simulaban huir de unos perseguidores en coche y que tuvieron que frenar de golpe para no atropellar al herido, que fue evacuado en ambulancia.

La presencia de Cruise y Diaz, él con vestimenta gris y gafas de sol y ella con camisa blanca y el pelo recogido, levantó gran expectación entre los gaditanos, algunos de los cuales vieron la grabación desde sus propios balcones. Eso sí, de blanco y luciendo pañuelo rojo para ambientar la escena. Tras el rodaje, ambos actores regresaron al hotel de Sevilla en el que se hospedan.