Lynne Spears, la madre de la cantante Britney Spears, se considera culpable de todo lo malo que le ha ocurrido a su hija, según ha declarado a Life & Style. "Me siento culpable. ¿Qué madre no se sentiría así?", dijo. Y añadió: "Me gustaría haber pasado más tiempo con ella mientras estaba de gira, pero tenía que cuidar de mis otros hijos. No eduqué a mis niños para tener carreras en Hollywood".