La presidenta argentina Cristina Kirchner hizo malabarismos protocolarios para tomarse una fotografía en la sede del Poder Ejecutivo junto a Ingrid Betancourt y la diva del pop Madonna. La exrehén de las FARC se había ido a la Casa Rosada para agradecerle a Cristina Kirchner los esfuerzos realizados por Argentina para que la guerrilla libere a sus cautivos. Según la prensa local, la anfitriona demoró más de la cuenta el final de la reunión a la espera de que Betancourt y la cantante coincidieran. Ambas conversaron sonrieron para los fotógrafos ante la mirada complacida de la mandataria (en la foto, dándose la mano, ante Kirchner). Madonna había estado en el despacho presidencial en 1995 durante la filmación de Evita.