Mark David Chapman, el asesino de John Lennon, recibe una vez al año visitas conyugales de su mujer en la prisión de máxima seguridad de Attica, en el estado de Nueva York, según desveló ayer el diario Daily News. Su mujer, Gloria Hiroko Chapman, vive en Hawái.

El asesino de Lennon tiene acceso desde 1992 a un programa de la prisión de Attica para favorecer el contacto entre presos y familiares, lo que le da derecho a pasar 44 horas seguidas con su esposa en un módulo individual sin cámaras ni guardias. Por otra parte, Chapman comparecerá esta semana ante la junta de libertad condicional del estado de Nueva York, que decidirá si le concede o no esta medida de gracia.