El exbeatle Paul McCartney triunfó ayer en la capital ucraniana, Kiev, con un gran concierto gratuito, celebrado a cielo abierto en la céntrica plaza de la Independencia ante medio millón de personas.

A pesar de una tormenta que convirtió las calles de Kiev en ríos revueltos, el cantante, que el próximo 18 de junio cumple 66 años, no hizo esperar ni un minuto al público calado hasta los huesos. Miles de admiradores llegados de distintas zonas de Ucrania, así como de varias antiguas repúblicas soviéticas, aguantaron el mal tiempo desde la madrugada del sábado.

Desde el mayor escenario que ha pisado en su vida, (medía 53 metros de ancho,) McCartney dirigió a sus admiradores frases en ucraniano, ruso e inglés. "Hay que haber nacido en la Unión Soviética para darse cuenta de lo que significa un concierto de Paul en Kiev", dijo un kieveño seguidor de los Beatles.

El espectáculo, denominado el Independence Concert , se celebró con el propósito de unir a todos los ucranianos, divididos en los campos proruso y proeuropeo, a través de su afición al mítico grupo británico. McCarntey interpretó una treintena de sus canciones más famosas.