El 28 de julio una noticia cayó como un plomo sobre Michael Douglas. Su hijo Cameron, de 31 años, fue arrestado por tráfico de drogas en un hotel de Manhattan. Desde entonces, está retenido en una prisión federal y podría enfrentarse a una condena de pena perpetua si es declarado culpable de haber vendido miles de dólares en metanfetaminas. Existe, además, el agravante de que el joven fue detenido previamente por posesión de cocaína. El actor ha roto su silencio en una entrevista a la revista AARP donde se sincera, dice estar devastado y admite que podría haber sido un mejor padre. "Asumiré las responsabilidades que pueda tener. ¿Habría sido mejor si hubiera estado cerca mucho más tiempo? Sin lugar a dudas. Hubo ausencias, no he sido un ángel", reveló.

Según sostiene la acusación, Cameron envió a través del servicio de mensajería FedEx grandes cantidades de droga desde California hasta Nueva York. El padre declara que su hijo "tiene toda una vida por delante y que ahora reconoce sus demonios y sus luchas internas".

CONVIVENCIA CON TIPOS DUROS Sobre su estancia en prisión, el actor de Instinto básico, de 65 años, explica que su hijo es un "chico duro", aunque está preocupado por su bienestar. "Está en una cárcel federal, donde hay hombretones grandes y malos".

Tocando temas más animados, Michael Douglas habló de su relación con Catherine Zeta- Jones, con quien lleva casado desde noviembre del 2000. "Gracias a Dios que le gustan los hombres mayores", bromeó por el hecho de que se lleve 25 años con la actriz galesa. También alabó la existencia de medicamentos para mejorar la potencia sexual como Viagra y Cialis. "Son maravillosos, pueden hacernos sentir más jóvenes", asegura Douglas.

En la entrevista, el actor siguió bromeando con su edad. Es consciente de que pronto será septuagenario: "Físicamente no seré capaz de perseguir a los niños que intenten ligar con mi hija Carys". Con todo, quiere dedicar todos sus esfuerzos a su familia, "no estoy tan preocupado por mi carrera".

Su próximo trabajo en el cine llegará a las pantallas norteamericanas el 23 de abril. Se trata de una secuela de Wall Street, en la que volverá a interpretar al despiadado ejecutivo Gordon Gekko. El reparto es un buen equilibrio entre promesas del celuloide como Shia LeBeouf o Carey Mulligan y actores consagrados como Susan Sarandon, Josh Brolin y Frank Langella. Además, repite Charlie Sheen con un cameo.