Tras un embarazo no exento de los más retorcidos rumores, la ministra de Justicia francesa, Rachida Dati, fue ingresada en la tarde de ayer en una clínica parisina para dar a luz a una niña a la que ha llamado Zohra, en homenaje a su madre, según informaron fuentes gubernamentales a France Presse. Tanto la madre, de 43 años, como la niña, que nació mediante cesárea, se encuentran en perfecto estado de salud.

La actual ministra de Justicia siguió desempeñando sus funciones ministeriales con normalidad hasta la semana pasada, alegando que "el embarazo no es una enfermedad". Su gabinete aseguró, hace unos días, que Dati apenas se tomará unos días de descanso tras el parto. En la historia francesa, solo una ministra dio a luz durante su mandato: la excandidata a la presidencia Segolène Royal. En España, Carme Chacón también dio a luz durante el ejercicio de su cargo de ministra de Defensa.

MESES DE ESPECULACIONES

El pasado mes de septiembre, la propia ministra se vio obligada a confirmar su embarazo tras las incesantes especulaciones de la prensa rosa, intrigada por la aparición de una barriguita en la silueta de Dati. Desde entonces, el tema que ha mantenido en alerta a toda Francia ha sido la identidad del padre, ya que la ministra de justicia --hija de padre marroquí y de madre argelina-- se ha empeñado en mantener en secreto al progenitor, justificando así su decisión: "Tengo una vida sentimental complicada".

Este mutismo alimentó todo tipo de comentarios y apuestas, a cual más sorprendente. En efecto, se llegó a atribuir la paternidad de la hija de Dati a una larga lista de hombres famosos, entre los cuales figuraban el expresidente del Gobierno español, José María Aznar, que lo desmintió, y algunos otros ministros franceses. El último en convertirse en potencial padre ha sido el hermano del presidente francés, François Sarkozy, tras saberse que habían celebrado la Navidad juntos.

Otros escándalos salpicaron la reputación de Dati durante los meses de embarazo, como el hecho de que un diario borró, usando el popular programa Photoshop, el valioso anillo que la ministra llevaba puesto para no provocar a los franceses en tiempos de crisis. Además, la que era considerada la niña mimada de Nicolás Sarkozy se ha tenido que enfrentar, estas últimas semanas, a los jueces y magistrados de su país, que no vieron con buen ojo su reforma del sector judicial y que, en señal de protesta, iniciaron unas huelgas nunca vistas anteriormente. En consecuencia, los franceses se muestran cada vez más descontentos con su ministra y se rumorea que el presidente Sarkozy no piensa renovarle su mandato ministerial. En este caso, Dati se convertiría en madre soltera y en paro.