Paul Weller, de 50 años, ha roto con su pareja desde hace 13 años y madre de dos de sus cinco hijos, Samantha Stock, de 38, para trasladarse a vivir con Hannah Andrews, una cantante de 23 años a la que contrató para hacer los coros en su último disco y con la que se fue de gira. Fuentes cercanas al músico explicaron que este y Andrews "han descubierto que tienen mucho en común, al margen de la diferencia de edad".