Con la mitomanía que envuelve la figura de Luciano Pavarotti, ayer en Italia se dio a conocer uno de los testamentos del tenor fallecido, en el que deja la mitad de su herencia a su viuda, Nicoletta Mantovani, y la otra a repartir entre sus cuatro hijas, según el diario La Repubblica.

El documento, que tiene fecha del 13 de junio, fue leído el pasado martes. Incluye, además, dos donaciones de 500.000 euros para sus más fieles consejeros, el asistente peruano Edward Tinoco y la secretaria Verónica. Sin embargo, existe otro testamento posterior, que fue redactado el 29 de julio y cuyo contenido se desconoce.

El pasado 13 de septiembre, el notario Luciano Buonanno aseguró en una entrevista a medios italianos que Pavarotti le llamó a su residencia a finales de julio con dos testigos para redactar un nuevo testamento.

POLEMICA Después fue el turno de Lidia La Marca, una amiga íntima del tenor, quien reveló que el cantante quería separarse de su esposa: "Siempre piensa en el dinero (en referencia a Nicoletta Mantovani), llega con documentos que me hace firmar" habría confesado el tenor a La Marca.

Y es que, mientras vivió, la fama de Pavarotti, fallecido a los 71 años el pasado 6 de septiembre a causa de un cáncer, fue aumentando de forma paralela a su incesante carrera comercial. El secreto de su éxito fue una magnífica voz y su carácter alegre. Pero no solo eso llevó al inconfundible señor de la espesa barba y redondez envuelta en esmoquin a los altares de la lírica mundial. Además estaba su espíritu financiero.

EXITO COMERCIAL "Pavarotti siempre se entregó a su música en un modo frenético. Pero las claves de su éxito, desde un punto de vista comercial, fueron una voz, bella y fácilmente reconocible (quien lo oía en la radio lo reconocía enseguida) así como una sonrisa que el público adoraba", explicó Bogdan Roscic, director administrativo de la Decca, la casa discográfica del tenor desde 1964 y con la que produjo más de 100 millones de discos.

Los derechos de autor, incluso la recopilación de sus mejores discos que la casa discográfica planea lanzar a finales de septiembre, también irán a parar a Mantovani, de 37 años, y a la pequeña Alice, la cuarta y más joven de las hijas del maestro.

Según datos no oficiales, el tenor ha dejado una herencia de 200 millones de euros. Una suma relativamente baja, pero a la que habría que añadir varios inmuebles, como un lujoso apartamento en Nueva York y otro situado en Montecarlo.