Sasha Obama solo tiene 9 años, pero ya apunta maneras. La hija pequeña del presidente de EEUU tiene mucha personalidad y carácter. Ayer no estaba previsto que apareciera en la foto oficial de la visita porque así lo habían solicitado desde el séquito de la primera dama. El Rey le dio un beso e intentó velar para que se cumpliera ese deseo acompañándola a un rincón del jardín para que esperase unos minutos a que los fotógrafos hicieran su trabajo. Pero la niña no estaba de acuerdo y se resistió, llegando incluso a tirar del brazo de Juan Carlos. La pequeña, que iba vestida con un falda-tutú en color amarillo, una camisa color salmón y bailarinas doradas a juego con las de su madre, insistió, lo que obligó a Michelle a llamarla para que participara en el posado. En ese momento, se la vio encantada y feliz, sonriendo con toda naturalidad.