El cineasta francopolaco Roman Polanski, acusado en Estados Unidos de haber mantenido relaciones sexuales con una menor hace 33 años, no será extraditado a ese país desde Suiza, según ha informado esta tarde la ministra de Justicia de la Confederación Helvética, Eveline Widmer-Schlumpf.

Tras ser detenido en Zúrich el pasado 26 de septiembre, donde había acudido para ser homenajeado en un festival de cinePolanski pasó dos meses en una prisión helvética, tras lo cual las autoridades le autorizaron a esperar una decisión final bajo arresto domiciliario, que cumplía desde hacía siete meses en una residencia que posee en la exclusiva estación de esquí de Gstaad. Con esta decisión están anuladas también las restricciones a su libertad, por lo cual no deberá más llevar el brazalete electrónico.

El arresto del director en Suiza causó indignación en el mundo del cine. El ministro francés de Cultura, Frédéric Mitterrand, fue criticado por ofrecer un firme apoyo al cineasta. El escritor francés Bernard-Henri Levy también mostró su apoyo a Roman Polanski. El caso dividió profundamente al mundo del cine en ambos lados del Atlántico, algunos asumiendo la causa del realizador, otros prefiriendo mantener la distancia.