Valentino, el emperador italiano de la moda, dispone durante tres días de los escenarios de la Roma imperial para celebrar los 45 años de su firma. "Solo por una vez y solo para Valentino" fue concedido el privilegio, único en la historia de Italia, de reconstruir algunas partes del templo de Roma y Venus frente al Coliseo, en las que, en plena fiesta, descendió de los cielos una mujer vestida de rojo, cabalgando una esfera luminosa y bailando en el vacío.

En los Foros Imperiales sonaba Norma , de Bellini, en la voz de María Callas. El espectáculo, titulado El nacimiento de la belleza , contó con dos firmas con Oscar para la decoración: Dante Ferretti y Valerio Festi.

Entre las columnas corintias iluminadas desde el interior se instaló una mesa para una cena de gala reservada a 600 huéspedes de todo el mundo. Estaban Carolina de Mónaco, con su hija Carlota y su marido Ernesto de Hannóver, Alexandra von Fürstemberg, los actores Uma Thurman, Andy García y Liz Hurley, y los diseñadores Tom Ford y Karl Lagerfeld, e incluso los Rolling Stones. Entre los comensales estuvieron Claudia Schiffer, Eva Herzigova, Elle McPherson, la editora de Vogue, Anna Wintour, y Meryl Streep.

La mayoría de los famosos habían acudido antes al desfile de otoño-invierno, en el conjunto monumental del Santo Spirito, en lo que supuso la vuelta de Valentino a Roma, tras 15 años desfilando en París.

El modisto ha donado al ayuntamiento romano 200.000 euros para financiar la restauración del templo de Roma y Venus.