La marina israelí ha abordado esta madrugada a las seis embarcaciones de la llamada Flota de la Libertad que se dirigían a la franja de Gaza transportando 10.000 toneladas de ayuda humanitaria. Al menos 10 pasajeros de la flotilla murieron durante el asalto, según fuentes oficiales israelís, aunque algunos medios regionales cifran las víctimas en 17. Hay además 60 heridos, según una televisión turca.

El Ejército hebreo confirmó que el abordaje se produjo en aguas internacionales, fuera de la jurisdicción israelí. En los barcos, que partieron el pasado 22 de mayo, viajaban cerca de 700 pasajeros, incluidos 25 eurodiputados, dos activistas de la onegé catalana Cultura, Pau i Solidaritat y un periodista valenciano, que llevan alimentos, materiales de construcción, equipos médicos y productos de necesidad básica.

No es fácil obtener información de primera mano sobre lo ocurrido. Israel ha impuesto la censura de prensa a los medios locales y ha cerrado el puerto de Ashdod a la prensa internacional. En este puerto, situado al sur de Israel y muy cerca de Gaza, se espera que llegue la flotilla escoltada por la marina hebrea. Según uno de sus portavoces castrenses, el asalto se produjo alrededor de las 4.30 de la madrugada.

Los militares se toparon con "una fuerte resistencia" y utilizaron material antidisturbios y munición real para hacer frente al pasaje que, según las mismas fuentes, les recibió con cuchillos y disparos. Según una onegé turca, la mayoría de los muertos son turcos y tres barcos viajan con esta bandera.

"Consecuencias irreparables"

El incidente ya ha desencadenado las primeras reacciones diplomáticas. Turquía llamó ayer a consultas al embajador israelí en Ankara y uno de sus oficiales aseguró que este episodio tendrá consecuencias irreparables en la relación entre ambos países, prfundamente deterioradas desde la guerra de Gaza del 2009. Desde la franja, el Gobierno de Hamás llamó a los simpatizantes de la causa palestina a lanzar una intifada contra las embajadas israelís en el mundo.

En Estambul, cientos de personas se concentraron ante el Consulado de Israel e intentaron penetrar en él pero fueron repelidos por la policía.

Comunicado del Gobierno turco

El Ministerio de Asuntos Exteriores de Turquía ha hecho público un comunicado en el que asegura que el Gobierno israelí tendrá que enfrentarse a las consecuencias por su comportamiento y ha establecido un centro de crisis para seguir el desarrollo de los acontecimientos.

El embajador israelí en Ankara, Gaby Levy, ha sido convocado para pedirle explicaciones y recibir la protesta turca. El comunicado ministerial dice que el Ejército israelí ha usado la fuerza contra un grupo de ayuda humanitaria, incluidos "ancianos, mujeres y niños" que viajan en los barcos, lo que consideró "inaceptable".

"Tomando como objetivo a civiles inocentes, Israel ha mostrado una vez más que no le preocupa la vida humana, ni las iniciativas pacíficas. Condenamos fuertemente esta práctica inhumana de Israel", añadió la nota. "Este incidente, que ha tenido lugar en aguas internacionales abusando de la ley internacional, tendrá consecuencias imposibles de compensar", avisó el Ministerio turco.