Dos menores murieron hoy y quince resultaron heridos a causa de la explosión de una bomba colocada cerca de una escuela de la ciudad noroccidental paquistaní de Peshawar, informó a Efe una fuente policial. El artefacto, activado por control remoto, estalló justo cuando los escolares entraban en el recinto, según la fuente, que especificó que las víctimas tienen entre 10 y 15 años. Peshawar es la capital de la conflictiva provincia de Khyber-Pakhtunkhwa (KPK), que colinda con las áreas tribales paquistaníes, donde busca abrigo la insurgencia talibán y el Ejército ha lanzado varias operaciones militares. Los ataques con granadas y la colocación de bombas son relativamente frecuentes en Peshawar, aunque muchas de las explosiones son de baja intensidad y no causan un gran número de muertos. Según un estudio del Instituto de Pakistán para Estudios de Paz (PIPS), en 2010 se registraron un total de 2.113 ataques insurgentes, terroristas o de corte sectario, que acabaron con la vida de 2.913 personas y dejaron heridas a otras 5.824. La provincia de KPK, la suroccidental de Baluchistán y las siete demarcaciones tribales (excepto una) que limitan con Afganistán son las más afectadas por la violencia integrista.