Un atentado con coche bomba dirigido contra un jefe policial de la ciudad de Kirkuk (250 kilómetros al norte de Bagdad) causó esta mañana 6 muertos y 22 heridos, entre ellos el jefe policial. Según dijo a Efe un agente policial de la ciudad, que se identificó solo como Borhan, el coche bomba estaba conducido por un suicida, que detonó su carga explosiva al paso de Jatab Omar, jefe de la Policía de Emergencias de la ciudad, por el barrio de "Tisaín al Yadida".

Dos guardaespaldas de Omar y cuatro transeúntes murieron en el acto, mientras que el oficial quedó gravemente herido y fue de inmediato trasladado al hospital. Otras 21 personas han quedado heridas de diversa consideración, entre ellas varias mujeres y niños. La explosión fue tan potente que causó abundantes daños en los edificios cercanos y en varios automóviles.

Kirkuk es una de las ciudades más violentas de Irak: en ella conviven en medio de una enorme tensión kurdos, árabes suníes y turcomanos -estos dos últimos enfrentados a los kurdos-, y la ciudad se ha convertido en uno de los puntos preferidos por la insurgencia suní. Los alrededores de la ciudad son muy ricos en campos petrolíferos, y por ello los kurdos pretenden incorporar toda la provincia a la Región Autónoma del Kurdistán -formada por tres provincias contiguas-, para lo que en teoría hay previsto un referéndum antes de fin de año que nadie piensa que pueda celebrarse dentro del plazo.