El acero recuperado tras el desplome de las Torres Gemelas de Nueva York, y que fue almacenado y escrutado en busca de la menor pista sobre los atentados del 11-S del 2001, fue enviado ayer desde Nueva York a Misisipí, al sur de EEUU. En unos astilleros de ese estado, el acero será procesado para la construcción de un navío de guerra, que será bautizado con el nombre de USS New York , como homenaje a las 2.800 víctimas mortales.

La construcción del USS New York costará unos 800 millones de euros (unos 133.000 millones de pesetas). El trabajo comenzará a principios del 2003, pero el barco no estará operativo hasta el 2007.