La fuerza multinacional en Irak que encabeza EEUU, al igual que los grupos armados insurgentes y las fuerzas de seguridad iraquís, cometió "abusos graves, entre ellos crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad", según denuncia Amnistía Internacional en el informe anual sobre el estado de los derechos humanos que fue presentado ayer.

El informe --que recoge lo acontecido en el mundo en el 2005--, subraya que "miembros de la fuerza multinacional desplegada en Irak hicieron un uso excesivo de la fuerza, que causó víctimas civiles". Amnistía recoge varios ejemplos, entre ellos la muerte de Walid Jaled, ingeniero de sonido iraquí que trabajaba para la agencia Reuters, tiroteado por tropas de EEUU cuando se desplazaba a la escena de un ataque insurgente, o la muerte de 70 personas (20 de ellos civiles, incluidos varios niños) cerca de Ramadi en un ataque aéreo estadounidense.

Los grupos armados insurgentes y las fuerzas de seguridad iraquís no se libran de la denuncia. Los primeros "cometieron abusos graves contra los derechos humanos, que constituían crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad". "Centenares de civiles iraquís --subraya el informe-- murieron o resultaron heridos en ataques perpetrados por grupos armados".

TORTURA En cuanto a las fuerzas de seguridad iraquís, existen "indicios de tortura y de malos tratos generalizados". Algunos de los métodos "consistían en colgar a la víctima de los brazos, quemarla con cigarrillos, golpearla, aplicarle descargas eléctricas en diferentes partes del cuerpo, estrangularla, fracturarle las extremidades y abusar sexualmente de ella".

Como en años anteriores, la preocupación fundamental de Amnistía sigue siendo "la erosión de principios fundamentales" en nombre de la lucha antiterrorista. "Hubo gobiernos que paralizaron instituciones internacionales y malgastaron recursos públicos en pos de mezquinos intereses de seguridad, sacrificaron principios en nombre de la guerra contra el terror y no se dieron por enterados de las violaciones generalizadas de derechos humanos", afirmó en Londres la secretaria general de Amnistía, Irene Khan.

CIERRE DE GUANTANAMO En Madrid, el director de Amnistía Internacional-España, Esteban Beltrán, puso coordenadas a estas prácticas: las de Guantánamo. Es necesario "echar llave y cerrar la cárcel de Guantánamo", insistió el director, que añadió que "Estados Unidos debe dar a conocer también los nombres y el paradero de sus detenidos en centros secretos". Beltrán destacó que "prácticamente todos los Gobiernos del mundo han pedido su cierre".