El ministro alemán de Exteriores, Guido Westerwelle, ha calificado hoy de "malentendido" las declaraciones del presidente francés, Nicolas Sarkozy, en las que aseguró que Alemania desmantelaría los campamentos de gitanos en su territorio y negó rotundamente esta posibilidad.

"La canciller (Angela Merkel) ha expresado públicamente y me informó personalmente sobre cómo fue el desarrollo de la conversación" con Sarkozy sobre ese asunto, dijo el liberal Westerwelle en declaraciones a la emisora pública Deutschlandfunk. Tras subrayar que "un anuncio así nunca ha existido" en referencia a que Alemania desmantelaría los campamentos de gitanos en su territorio, dijo "presumir que se trata de un malentendido".

Ante el escándalo surgido en la cumbre de la Unión Europea (UE) en Bruselas de este jueves, Westerwelle hizo un llamamiento a Francia para que respete el derecho europeo, aunque también defendió al Gobierno de ese país ante acusaciones severas. "Arrinconar a Francia en la esquina de los crímenes de la Segunda Guerra Mundial es absolutamente inaceptable e hiriente y ha conducido probablemente a la fuerte reacción del presidente francés", comentó el jefe de la diplomacia alemana.

La canciller alemana, Angela Merkel, desmintió anoche, a través de un portavoz, haber hablado con el presidente francés, Nicolas Sarkozy, de desmantelar campamentos de gitanos también en Alemania. La cuestión no fue abordada por la canciller ni en la cumbre de líderes de la UE ni en conversaciones con el presidente francés, afirmó el portavoz gubernamental, Steffen Seibert, de regreso a Berlín, tras la cita en Bruselas.