La activista saharaui Aminatu Haidar regresó hoy a El Aaiún en un vuelo procedente de Gran Canaria (España), sin que a su llegada al aeropuerto se registraran incidentes reseñables, informaron a EFE fuentes de la familia de Haidar. La activista no tuvo problemas al pasar el control de pasaporte pese a rellenar su nacionalidad como saharaui y escribir Sahara Occidental en el apartado del país, añadió la fuente, según la cual la policía siguió a Haidar hasta su casa pero sin impedirle la libre circulación. Haidar aterrizó sobre las 16.30 hora local y GMT y prevé visitar a los saharauis detenidos y heridos en el desmantelamiento del campamento de protesta saharaui de Gdaim Izik, a unos 18 kilómetros de El Aaiún, y en los posteriores disturbios en la ciudad. Esta tarde, según la misma fuente, cerca de un centenar de personas acudieron por sexto día consecutivo a la conocida como Cárcel Negra de El Aaiún con el objetivo de ver a sus familiares recluidos allí en relación con esos altercados, sin que las autoridades marroquíes les hayan permitido todavía la visita. Dos asociaciones saharauis de derechos humanos denunciaron ayer esta situación y reclamaron que se autorice a las familias visitar a los detenidos para darles "ropa y alimentos". El Aaiún fue escenario a principios de mes de los más violentos enfrentamientos callejeros en la ex colonia española en casi dos décadas, a raíz del desmantelamiento de Gdaim Izik, donde miles de saharauis reclamaban mejoras socioeconómicas. El ministro marroquí del Interior, Taib Cherkaui, informó la semana pasada en una rueda de prensa de que 113 personas habían sido detenidas por esos disturbios, de las cuales ocho -incluidos miembros del comité del campamento de protesta- van a ser juzgadas por un tribunal militar, aunque asociaciones saharauis elevan la cifra de arrestados a 127.