El secretario general de las Naciones Unidas, Kofi Annan, aplaudió ayer el comienzo de la retirada israelí de la franja de Gaza, que calificó como un "momento de promesa y esperanza". Al mismo tiempo, se declaró confiado en que el proceso "sea llevado a término de una manera pacífica y sin inconvenientes".

Annan hizo mención expresa de "las grandes cualidades de hombres de Estado" que requerirán los dirigentes israelís y de la Organización Nacional Palestina (ONP) para "hacer frente a los desafíos políticos planteados en esta nueva etapa", y también "a largo plazo".

James Wolfensohn, enviado del Cuarteto --Estados Unidos, Rusia, la ONU y la Unión Europea-- en Oriente Próximo, informó del progreso que supone la retirada israelí de la franja y "del trabajo considerable que todavía queda por hacer", en referencia a la reanudación del proceso de paz.

Arabia Saudí apeló a Israel a que "a la retirada de Gaza le siga la de Cisjordania y la de todos los territorios palestinos ocupados, para permitir al pueblo palestino edificar su propio estado independiente con Jerusalén como capital", señaló un comunicado oficial del Gobierno.