Una operación militar llevada a cabo por unidades de élite del Ejército argelino terminó ayer por la mañana con la liberación de 17 de los 32 europeos que habían sido secuestrados por el Grupo Salafista para la Predicación y el Combate (GSPC) --una organización de integristas islámicos que, según Argel, mantiene estrechos vínculos con Al Qaeda-- entre el 19 de febrero y el 11 de abril. Los liberados son 10 austriacos, seis alemanes y un sueco que ayer mismo, por la tarde, despegaron del aeropuerto de Argel hacia Austria y Alemania. Se desconoce la suerte de los restantes 15 rehenes.

"BREVE ASALTO"

La operación tuvo lugar en la región de Tamanrasset, unos 1.900 kilómetros al sur de la capital. Según el Ejército, se trató de un "breve asalto" que acabó con la liberación, "sanos y salvos", de los secuestrados. El periódico argelino El Watan , sin embargo, asegura que durante el operativo tuvieron lugar "violentos combates" durante los cuales fueron abatidos nueve de los 10 guerrilleros que, siempre según el diario, custodiaban a los rehenes.

Los Gobiernos de Austria y Alemania recibieron con enorme satisfacción la noticia. "Es la mejor del día", declaró el canciller austriaco Wolfgang Schüssel. Sin embargo, ahora existe una gran preocupación por la suerte que puedan correr los 10 alemanes, los cuatro suizos y el holandés que siguen secuestrados.

Según informó ayer el Ministerio del Interior argelino, este grupo se encuentra en manos de una segunda organización terrorista. Sin embargo, los gobiernos europeos involucrados y otras fuentes en Argel no descartan que sea el mismo GSPC el que los tenga en sus manos, con lo que esto representa, en términos de riesgo para su integridad, después de la operación de ayer.

La jefa de la diplomacia suiza, Micheline Calmy-Rey, se puso en contacto con su homólogo argelino, Abdelaziz Beljadem, para pedirle que no cejen los esfuerzos para liberar sanos y salvos al resto de los rehenes. Un portavoz oficial alemán, por su parte, declaró que los secuestrados se encuentran en una "situación precaria", e hizo un llamamiento a las autoridades argelinas para que no hagan nada que pueda poner en peligro sus vidas. Los indicios de las fuerzas de seguridad de Argel apuntan a que el segundo grupo de rehenes se encuentra en la provincia de Illizi, cerca de la frontera con Libia.

INTENSA BUSQUEDA

La operación de rescate de las unidades de elite argelinas estuvo precedida por una intensa labor de búsqueda en la cual participaron cerca de 7.000 personas, entre ellas 5.000 soldados del Ejército, en una superficie de más de dos millones de kilómetros cuadrados en el sur y el sureste del país. La búsqueda de los 15 rehenes que aún se encuentran retenidos puede resultar especialmente complicada, si se tiene en cuenta que la región de Illizi está plagada de cuevas inexploradas, y que la topografía es hostil.

Todos los turistas secuestrados viajaban por el Sáhara argelino en vehículos todoterreno y sin la ayuda de guías, en una región donde suelen abundar las bandas de ladrones, por lo que en un principio se creyó que se trataba de saqueadores de tesoros arqueológicos.