Varios oficiales de la Armada abordaron ayer el buque Pilín León , fondeado en el lago de Maracaibo, con sus tanques llenos. Otros 12 petroleros, alguna refinería y parte de los distribuidores habían parado máquinas siguiendo el ejemplo del buque. El capitán, Daniel Alfaro, y la tripulación se resistían a entregar el buque. Alfaro insistió en que "se necesitan años de experiencia para poder comandar un buque de esta envergadura". Siete directivos de Petróleos de Venezuela (Pdvsa) dimitieron.