Julian Assange comparecerá hoy por tercera vez ante la justicia en Londres. El Tribunal Superior deberá decidir sobre el recurso presentado el martes por las autoridades suecas contra la libertad bajo fianza del fundador de Wikileaks. En esta ocasión la decisión será inapelable. Si el juez acepta el recurso de Suecia, Assange continuará en la cárcel a la espera del juicio de extradición que comenzará el 11 de enero. En caso de que la apelación sea rechazada, el detenido podrá quedar en libertad bajo estrictas medidas de control en la mansión rural de un amigo, en el este de Inglaterra, a 200 kilómetros de Londres.

Antes, sin embargo, tendrá que conseguir la fianza en metálico de 200.000 libras exigida por el juez. En la tarde de ayer se había recaudado la mitad de esa suma, según Mark Stephens, uno de los abogados de Assange. La colecta está resultando especialmente difícil después de que las grandes compañías de tarjetas de crédito y pagos americanas, como Visa, Mastercard y Paypal, hayan bloqueado los pagos en la página de Wikileaks. Varias celebridades, como los directores de cine Michael Moore y Ken Loach, habían ofrecido donativos. El juicio de extradición puede prolongarse durante meses.

Por otra parte, el expresidente cubano Fidel Castro dijo ayer que Assange ha puesto moralmente "de rodillas" a EEUU.