Un ataque aéreo de fuerzas de la OTAN en Afganistán el viernes acabó con la vida de ocho miembros de las fuerzas de seguridad afganas: cuatro soldados, tres policías y un civil que trabajaba para el Ejército, informó ayer el Ministerio de Defensa afgano. También resultaron heridos 18 afganos y cinco militares estadounidenses. Las autoridades han abierto una investigación.

Los hechos ocurrieron en el distrito de Bala Murghah, en la provincia occidental de Badghis. Las bombas de los aviones de la OTAN cayeron sobre las posiciones de las fuerzas terrestres aliadas que libraban un combate contra los talibanes. El ataque aéreo formaba parte de una operación de búsqueda de dos soldados de EEUU desaparecidos. Fuentes de los insurgentes aseguraron que los dos soldados cayeron al río y que recuperaron sus cuerpos.