Entre las primeras decisiones que ha tomado el Ejecutivo iraquí tutelado por Estados Unidos destacan la creación de un tribunal de crímenes de guerra para juzgar a Sadam Husein y a sus principales acólitos, y la suspensión de los contratos que Rusia había suscrito con el régimen depuesto para la explotación del petróleo.

En su tercera reunión, el Gobierno provisional acordó "formar una alta comisión judicial para indagar en los diversos crímenes cometidos y juzgar a los criminales de guerra", según informó el portavoz del Congreso Nacional iraquí. Entifadh Qanbar precisó: "Estados Unidos no ha decidido qué hacer con los 55 (máximos responsables del Gobierno de Sadam). El Consejo de Gobierno asumirá la tarea de juzgarlos y de castigarlos de acuerdo con la ley". "Eso incluye a Sadam Husein, el mayor criminal", añadió.

ANUNCIO EN MOSCU

El primero en informar de que los contratos de las petroleras rusas "están en el aire" fue el embajador de Estados Unidos en Moscú, Alexander Vershbow. "Hemos suspendido los contratos que las compañías rusas firmaron con el régimen de Sadam. No están anulados, pero tampoco siguen en vigor. Su futuro lo decidirá el nuevo Gobierno iraquí", anunció ayer Vershbow en una entrevista a la agencia Interfax.

El Kremlin ha declarado en varias ocasiones que tanto Washington como las nuevas autoridades iraquís han de "respetar plenamente" los intereses rusos en Irak.