El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ha afirmado hoy que la comunidad internacional y Naciones Unidas afrontan su mayor catástrofe humanitaria con el terremoto de Haití. "No hay duda de que nos enfrentamos a una gran emergencia humanitaria y de que se necesitarán los mayores esfuerzos de asistencia [para los haitianos]", ha dicho.

Relacionadas

Ha agregado que los reconocimientos desde el aire que han efectuado los cascos azules de la ONU destinados en el país han confirmado que "el terremoto ha tenido un efecto devastador en la capital, Puerto Príncipe", por lo que ha pedido "ayuda urgente" a la comunidad internacional.

Ban ha expresado su preocupación por la suerte del centenar de empleados de la ONU que se encontraban en la sede de la misión de la organización en Haití (Minustah) cuando se ha desplomado por el seísmo de 7 grados que se registró anoche con epicentro a 15 kilómetros de la capital.

PIDE AYUDA A LA COMUNIDAD INTERNACIONAL

Los equipos de rescate, que aún no han podido establecer el número de muertos y heridos, han recuperado al menos cinco cadáveres entre los escombros del edificio de la ONU, situado en la parte alta de Puerto Príncipe. Entre el personal de Naciones Unidas que sigue desaparecido se encuentra el jefe de Minustah, el tunecino Hedi Annabi, según fuentes de la organización.

Ante la gravedad de la situación, el secretario general ha apelado a la "generosidad", y ha pedido a la comunidad internacional que "acuda al rescate de Haití en este momento de necesidad". "Lo sucedido es una tragedia para Haití, el pueblo haitiano y Naciones Unidas", ha agregado el secretario general, que ha estado en "estrecho contacto" con las autoridades de países donantes como EEUU para coordinar la operación de ayuda.

FACILITAR EL TRASLADO DE LOS HERIDOS

Ban también ha afirmado que Naciones Unidas ha movilizado sus equipos de emergencia para ayudar a coordinar la llegada de ayuda humanitaria, y se ha autorizado una partida de 10 millones de dólares del fondo de emergencias de la organización.

Los ingenieros militares de Minustah han empezado a limpiar de escombros las principales vías de comunicación para facilitar el traslado de heridos y la llegada de ayuda humanitaria, ha dicho el secretario general. "Las comunicaciones son muy difíciles, hemos conseguido ponernos en contacto vía satélite, pero es muy complicado", ha añadido.

Asimismo, ha anunciado que enviará a Puerto Príncipe al secretario general adjunto para Operaciones de Paz de la ONU, el guatemalteco Edmond Mulet, para que se haga cargo temporalmente de las operaciones en el país.