El presidente de la Comisión Europea, el portugués José Manuel Duaro Barroso, acudirá a defenderse el próximo miércoles ante el pleno del Parlamento Europeo. Barroso rebatirá la moción de censura presentada contra él por un grupo de diputados euroescépticos por su relación con el multimillonario griego Spiro Latsis. El mandatario comunicó ayer su decisión a los miembros del Ejecutivo. El debate tendrá lugar cuatro días antes del crucial referendo francés sobre la Constitución Europea.

La moción de censura, según Barroso, es una iniciativa destinada a perjudicar a las instituciones europeas poniendo en duda su honradez e integridad, por lo que precisa una respuesta política personal. Los principales grupos de la Eurocámara --populares, socialistas, liberales y verdes-- se oponen a la moción, que han calificado como "injustificada y desproporcionada".

Los 77 eurodiputados firmantes de la moción de censura reprochan a Barroso que no haya aclarado las circunstancias en las que él y su esposa aceptaron unas lujosas vacaciones pagadas en el yate del millonario Latsis el pasado verano, cuando ya había sido designado presidente de la Comisión Europea. El grupo Latsis logró que el año pasado el Ejecutivo comunitario autorizara una importante ayuda pública de Grecia a sus empresas.

Barroso siempre ha dicho que esas vacaciones fueron un asunto privado, ya que Latsis es un "amigo personal" de su época de estudiante. La moción de censura es "absurda", insistió la portavoz de la Comisión Europea. Barroso "no tiene nada que ocultar y ya lo ha explicado todo, pero está dispuesto a hacerlo de nuevo", añadió la portavoz.

LOS GUARDAESPALDAS Sin embargo, la polémica persigue a Barroso. El último asunto es el doble salario que percibe su escolta personal, lo que está prohibido por la normativa comunitaria. Los cinco policías portugueses que le protegen reciben un salario mensual del Estado portugués y su sueldo como funcionarios europeos.