La policía belga detuvo ayer a un grupo de 14 presuntos terroristas islamistas vinculados a Al Qaeda, ante los indicios de que planeaban un atentado suicida inminente. Todas las detenciones se produjeron en Bruselas, salvo una en Lieja. Las autoridades decidieron adelantar la operación para no correr ningún riesgo ante el inicio de la cumbre europea. Tres de los detenidos acababan de regresar de campos de entrenamiento en Afganistán o Pakistán. Uno de ellos había recibido la orden de cometer un atentado y se había despedido de su familia, explicó el fiscal federal Johan Delmulle.

"No sabemos dónde se iba a realizar el atentado. Podría ser una operación en Afganistán o Pakistán, pero no puede descartarse totalmente que el objetivo estuviera en Bélgica o en otro lugar de Europa", indicó el fiscal.

REGISTROS La policía registró 16 domicilios, aunque no encontró armas ni explosivos. Entre los detenidos figura Malika El-Aroud, belga de origen marroquí cuyo primer marido fue uno de los asesinos del líder antitalibán afgano Ahmad Sha Masud. Su segundo esposo es uno de los que acababan de volver de los campos de entrenamiento, y ella tiene un blog en el que apoya el terrorismo. El grupo ya había planeado atentar en Bélgica en diciembre del 2007, "pero gracias a la alerta dada por la policía" dieron marcha atrás, dijo el fiscal.