Aunque aterrizó ayer en Ankara, el presidente alemán, Christian Wulff, inicia hoy en Turquía un viaje oficial que le llevará a reunirse con los máximos representantes políticos y sociales de ese país, justo cuando el debate sobre la inmigración en Alemania --y, en especial, la de la comunidad musulmana-- ha alcanzado su punto más álgido y polémico. Wulff se reunirá con el presidente turco, Abudulá Gül, y con el primer ministro, Recep Tayyip Erdogan. Además pronunciará un discurso en el Parlamento.

En el trasfondo de este viaje está no solo el anuncio por parte del Gobierno alemán del endurecimiento de las leyes de inmigración, sino, principalmente, las palabras de la cancillera, Angela Merkel, que el fin de semana anunció el fracaso en Alemania de la sociedad multicultural. Todo ello ha contribuido a potenciar más el creciente sentimiento de islamofobia que se extiende por toda Alemania, donde viven cerca de tres millones de turcos.