El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, ha vuelto a insistir hoy en que solo bromeaba cuando hace un año dijo que el Gobierno paritario español era "demasiado rosa". El político se ha presentado como el primer admirador de las mujeres: "¿Cómo podéis pensar que el presidente italiano, la patria de Casanova, de los 'playboys', pudiera decir algo negativo hacia las mujeres ministras?", ha asegurado en rueda de prensa junto al jefe del Ejecutivo español, José Luis Rodríguez Zapatero.

Berlusconi ha acusado a la "prensa española" de haber reflejado sus comentarios sobre lo rosa del Gobierno español "en el sentido opuesto" al que él quiso darles. El mismo ha aclarado el tema con las ministras que han participado hoy en la XVI Cumbre Hispano-italiana.

ADMIRACIÓN

Después, en la rueda de prensa junto a Zapatero, ha insistido en que fue "una broma" con la que quería mostrar su "admiración para todas ellas". "Bromeé y dije, bueno, ahora Zapatero no solo tendrá que rendirle cuentas a su mujer en su casa sino que tendrá que rendirle cuentas a seis mujeres en el Consejo de Ministros", añadió Il Cavaliere.

El jefe del Gobierno italiano incluso ha agradecido la pregunta de una periodista porque quería aclarar que, en realidad, él es "archiconocido" en Italia por ser "un gran admirador" de las mujeres, de modo que de su boca nunca pudieron "salir expresiones negativas" hacia esas "representantes de la otra mitad del cielo y que están sentadas en la tierra en un sillón ministerial".

Además, ha recordado que su Gobierno tiene "cuatro ministras mujeres estupendas, con un enorme entusiasmo" y acto seguido no ha dudado en decir que las mujeres son "mejores" en el colegio y la universidad, "más puntuales en el trabajo" y "más responsables que los hombres".

"Tenéis la capacidad de llegar a la solución de los problemas de forma intuitiva, con vuestro talento, nosotros tenemos que hacer una serie de razonamientos para llegar donde vosotras llegáis mucho antes". El mandatario ha lanzado un elogio final al género femenino: "Sois el mejor regalo que Dios nos haya dado a nosotros los hombres".

SILENCIO DE ZAPATERO

Finalizada su explicación, Berlusconi ha pedido un aplauso: "Pensé que me ibais a aplaudir, que me iban a aplaudir las mujeres, no los hombres. Para vosotros, claro, es muy fácil", ha añadido sonriente frente a los periodistas y los ministros de los dos gobiernos que participaron en la cumbre, entre ellos la vicepresidenta económica, Elena Salgado y la ministra de Defensa, Carme Chacón.

Zapatero no ha querido añadir nada sobre el tema y se ha limitado a recordar el "sentido del humor" de Berlusconi y su "actitud de deferencia ante el Gobierno de España. "Nunca lo dudé y así lo hemos comentado en alguna ocasión, y lo saben también las ministras de nuestro Gobierno", ha concluido.