El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, presentó ayer una querella ayer contra el rotativo L´Unità , el que fuera órgano del Partido Comunista Italiano (PCI), por haber publicado artículos relacionados con su vida privada que considera difamatorios. El primer ministro pide dos millones de euros por daños, 200.000 euros a cada uno de los cinco redactores de dicha publicación y otros 200.000 más a su directora, Concita De Gregorio.

"Como hizo el fascismo, Berlusconi quiere cerrar el diario", afirma la empresa, que llama a sus lectores y "a todos los demócratas a movilizarse en defensa de la libertad de prensa". La oposición progresista (PD) y los colectivos de informadores ya preparaban una manifestación nacional para mediados de este mes después de que Berlusconi se querellase el pasado lunes contra La Repubblica y de los ataques, desde hace una semana, del diario de su familia, Il Giornale , al rotativo de la Conferencia Episcopal, Avvenire , por haber criticado la conducta privada del primer ministro italiano.