El bloqueo que Israel impone a la franja de Gaza está provocando verdaderos estragos en el sistema monetario palestino, pues la moneda en circulación, el shékel, se ha convertido en una quimera, en vísperas de la fiesta del sacrificio o Eid al Adha , una de las más importantes festividades musulmanas, en la que cada familia acostumbra a degollar un cordero. Con motivo de estas fechas, en el mercado central de Gaza el bullicio es mayor que nunca, pero no la compra de productos.

Israel mantiene estrictamente cerrados todos los pasos comerciales con la franja desde hace un mes, en respuesta al disparo de cohetes y mortero por parte de milicianos, fruto, a su vez, de una incursión militar israelí.