El primer ministro británico, Gordon Brown, advirtió ayer que el Reino Unido se enfrenta a una amenaza terrorista "a largo plazo, que no va desaparecer en las próximas semanas o meses". Brown apuntó a Al Qaeda, como responsable de los atentados fallidos del viernes en Londres y del sábado en el aeropuerto de Glasgow.

En una entrevista concedida al canal 1 de la BBC, el nuevo jefe del Ejecutivo aseguró que las indagaciones policiales "están haciendo rápidos progresos" y pidió a la población que se mantenga vigilante. "Está claro que nos enfrentamos con asociados a Al Qaeda", declaró Brown.

"No claudicaremos, no nos dejaremos intimidar", afirmó rotundo el primer ministro. Su nuevo consejero de seguridad, Lord Stevens, añadió: "Los atentados son una gran escalada en la guerra que están librando contra nosotros los terroristas islámicos". "Al Qaeda ha importado las tácticas de Bagdad y Bali a las calles del Reino Unido. Están utilizan la misma tecnología y técnicas de fabricación de bombas", declaró este responsable al News of the world .

NUEVA REUNION DE CRISIS La ministra del Interior, Jacqui Smith, presidió una nueva reunión del comité de emergencia Cobra y hoy hará en la Cámara de los Comunes una declaración sobre la situación de la seguridad. El Reino Unido se halla desde el sábado en estado de máxima alerta, tras tres atentados frustrados en 36 horas.

El número de detenidos aumentó ayer a cinco. Un hombre de 26 años y una mujer de 27 fueron arrestados por policías de paisano en Cheshire. Otro individuo de 36 años fue apresado en Liverpool. Los tres fueron trasladados a Londres.

La policía hizo estallar un coche sospechoso en el aparcamiento del Royal Alexandra Hospital, en la localidad escocesa de Paisley, donde se halla internado en estado crítico uno de los dos hombres que trataron de atentar contra la principal terminal del aeropuerto escocés. "Creemos que el vehículo está relacionado con el incidente de Glasgow", afirmó una fuente de la policía.

El jefe de la lucha antiterrorista de Scotland Yard, Peter Clarke, se desplazó a Glasgow para asegurar la coordinación de las fuerzas implicadas. "En las próximas semanas podremos tener una idea de los métodos utilizados, la forma en que planearon sus ataques y la red a la que pertenecen", señaló Clarke.

Algunas fuentes creen que la elección de Glasgow puede no ser casual, ya que Brown es de Escocia, donde tiene una casa y a donde va asiduamente.