Gordon Brown, ministro británico de Economía y casi seguro sucesor de Tony Blair en la jefatura del Gobierno, rehusó hoy fijar un calendario para el repliegue de las tropas del Reino Unido en Irak. "No creo que en estos momentos se pueda fijar una fecha", dijo Brown en unas declaraciones a la emisora pública BBC radio 4.

"Quiero hacer mi propia evaluación de la situación", señaló el titular de Economía, quien adelantó que tiene previsto viajar al país árabe próximamente para tratar el asunto con los mandos militares británicos y las autoridades iraquíes. El probable sucesor de Blair salió así al paso de una información publicada hoy por el diario "The Times", que indicaba que Brown podría acelerar la retirada de las fuerzas británicas en Irak.

Un aliado del titular de Economía no identificado por el periódico manifestó que la situación de las tropas británicas debe mantenerse "bajo revisión" y que "eso figura entre los propósitos de su viaje (el de Brown)" al país mesopotámico. De cualquier manera, el ministro de Economía subrayó que el Reino Unido tiene la "obligación" de apoyar al Gobierno iraquí, aunque ahora el "énfasis" del esfuerzo británico debería centrarse en el terreno político y del desarrollo económico.

"Tenemos -explicó- que combinar la seguridad con la reconciliación política y el desarrollo económico que dé al pueblo (iraquí) una participación en el proceso". "Nuestras tropas están adoptando una posición de asesoramiento y supervisión, lo que permitirá que medio millón de miembros de las fuerzas de seguridad iraquíes tomen el control", agregó el responsable gubernamental.

Reconoce errores

Brown ya se refirió a Irak este viernes, cuando lanzó oficialmente su candidatura para sustituir a Blair como líder del Partido Laborista y jefe del Gobierno. El aspirante a primer ministro admitió que se cometieron "errores" en Irak, frente a la insistencia de su jefe en que hizo "lo correcto" al apoyar la invasión para derrocar al ex dictador iraquí Sadam Husein.