El primer ministro británico, Gordon Brown, reconoció hoy que fue un "error" no haber planeado la reconstrucción de Irak tras la caída de Sadam Husein. En su rueda de prensa mensual en la residencia oficial de Downing Street, Brown dijo, no obstante, que el Gobierno tenía que tomar la decisión que tomó, de invadir Irak, ante la negativa del presidente Sadam Husein a cumplir las exigencias de la ONU.

El jefe del Gobierno hizo esta afirmación tras confirmarse la semana pasada que comparecerá ante la comisión que investiga la guerra de Irak, antes de las elecciones generales británicas, que deberán convocarse como muy tarde el próximo junio. Al ser preguntado por los periodistas sobre la legalidad de la guerra de Irak (2003), el primer ministro dijo que responderá a estas inquietudes cuando preste declaración en esta comisión.

"Creo que el error de la guerra fue no hacer la reconstrucción y planearla de la manera que era necesaria, de modo que Irak pudiera recuperarse rápidamente después de la caída de Sadam Husein", afirmó. "En lo que se refiere a la guerra -agregó-, siempre he dicho que la resolución de la ONU que durante diez años le decía a Sadam Husein que tenía que tomar medidas (por desarme) para hacer frente a la amenaza que suponía para otros países fue una parte muy decisiva de las razones por las que tomamos las medidas que tomamos".

El ex primer ministro británico Tony Blair, principal responsable de meter al Reino Unido en la guerra de Irak, prestará declaración ante la comisión el próximo viernes, día 29.