El presidente de EEUU, George Bush, dejó claro ayer que sólo retirará las tropas de Irak cuando haya conseguido la estabilidad del país. "Nuestro enfoque se puede resumir de la siguiente manera --dijo--. Conforme los iraquís vayan poniéndose en pie, nos iremos retirando. Y cuando completemos la misión de vencer a los terroristas en Irak, nuestras tropas volverán a casa, a una nación orgullosa y agradecida", señaló, en su discurso radiado semanal.

El mandatario insistió en que el trabajo de las tropas en Irak "es parte esencial de la guerra contra el terrorismo", y explicó que lucha contra los terroristas "en el extranjero para no tener que afrontarlos en casa".

DESCONFIANZA Bush también empleó su discurso para referirse a la situación en Irán. Habló, no sin escepticismo, de la vía diplomática para intentar frenar la actividad nuclear de Teherán, reanudada el lunes. "Queremos que la diplomacia funcione y estamos trabajando en esta vía. Veremos si tenemos éxito o no", afirmó Bush.

El viernes, en una entrevista con la televisión israelí, había rechazado descartar el uso de la fuerza para atajar las ambiciones iranís. En este sentido, ayer, el canciller alemán, Gerhard Schröder le pidió dejar que Europa siga negociando.