La oposición demócrata de EEUU no baja la guardia y ha exigido al presidente, George Bush, que ofrezca una "estrategia de salida" para los 150.000 soldados de EEUU destinados en Irak en el importante discurso sobre el estado de la Unión que pronunciará esta noche ante el Congreso. Sin embargo, la Casa Blanca dijo que Bush no anunciará un calendario de retirada de tropas.

El presidente considera que "los calendarios envían un mensaje equivocado a los terroristas porque en ese caso lo único que tienen que hacer es esperar" a que las tropas se marchen, según explicó el portavoz de Bush, Scott McClellan. En Irak, agregó, "el calendario está basado en completar la misión", y eso incluye "entrenar a las fuerzas de seguridad iraquís hasta que estén completamente listas para defender el país".

El discurso de Bush estaba siendo enmendado ayer para capitalizar el "rotundo éxito" --según palabras del propio mandatario republicano-- de los comicios iraquís del domingo.

LA ENORME FACTURA BELICA Los demócratas también han hecho esfuerzos, antes del discurso, por ganar puntos gracias a las elecciones iraquís, presentándose como defensores de los intereses del pueblo estadounidense que, recuerdan, está sufragando el coste en muertos --más de 1.400-- y dinero: unos 1.000 millones de dólares al mes (poco más de 775 millones de euros).

"Las elecciones del domingo han sido un hito, pero lo que más necesitamos es una estrategia de salida, para que sepamos qué es la victoria en Irak y cómo podemos llegar a ella", recalcó Harry Reid, el senador por Nevada que encabeza la minoría demócrata en la Cámara alta del Congreso. De acuerdo con el representante, el presidente Bush debe presentar esta noche "una política más clara y más sólida para lograr el éxito" en Irak.

"El presidente tiene que ser franco con los estadounidenses sobre el duro trabajo que queda por hacer" en el país árabe, exigió por su lado el senador demócrata Joseph Biden, sin llegar a pedir la retirada de tropas, como hizo el jueves el veterano Edward Kennedy, la voz más liberal de los demócratas. "El objetivo de EEUU debe ser completar la retirada militar, tan pronto como sea posible, en el 2006", dijo Kennedy. El senador añadió que "al menos 12.000 soldados, y probablemente más, deberían marcharse de golpe" para dar señales claras de las intenciones estadounidenses y acabar con la sensación de ocupación.

EN EL CENTRO DEL EXAMEN La situación en Irak centrará buena parte de la evaluación anual sobre el estado de la Unión que presentará Bush esta noche, ante una sesión conjunta de ambas Cámaras del Congreso y el Gobierno en pleno. Según fuentes oficiales, el presidente aprovechará para pedir a la comunidad internacional que "aproveche la oportunidad creada por los comicios iraquís" para demostrar un "apoyo tangible" al nuevo Gobierno de Bagdad.