Víktor Bout, más conocido como el mercader de la muerte , buscado por EEUU por vender armas a la guerrilla izquierdista colombiana y por la Interpol por violar un sinfín de embargos militares decretados por la ONU, fue detenido ayer en Bangkok por la policía tailandesa. Nada más conocerse su arresto, la fiscalía de Nueva York anunció que presentaría una demanda de extradición.

Bout, el mayor traficante de armas del mundo, fue capturado en un hotel de cinco estrellas de la capital tailandesa tras la emisión de un mandato de arresto por un tribunal local. Las cadenas de televisión mostraron algunas imágenes de Bout en cautiverio, un hombre de gran envergadura, con bigote, vestido con una camiseta de color naranja y maniatado. Desde EEUU, Rogene Waite, de la agencia antidroga estadounidense (DEA), dio a entender que sus agentes habían tenido un importante papel en la operación policial que llevó a la detención de Bout.