El tradicional bipartidismo británico, sustentado en un sistema electoral que prima a los dos grandes partidos, se está empezando a quebrar por obra del avance tecnológico. Que muchos electores del Reino Unido estén dispuestos a canjear su voto a ciegas con otro votante, intercambiando sus sufragios por internet para romper el corsé de la circunscripción que limita las posibilidades de cambio, muestra cuán hartos están los ciudadanos británicos de tan rancio esquema político.

*Periodista.