La policía identificó en el 2007 a 169 bandas en Londres. Se calcula que el número de miembros no supera los 2.000, pero su impacto es enorme. Un 25% de bandas están implicadas en asesinatos y la mitad de ellas en ataques violentos. Las más numerosas son las formadas por jóvenes de origen afrocaribeño, seguidas por grupos del sureste asiático. En el 2008, 25 menores han muerto de forma violenta en Londres.