Irán juega a mantener el estatus quo en Afganistán, porque mientras EEUU y sus aliados estén entretenidos con Kabul, habrá menos posibilidades de que intenten una acción contundente contra ellos y su controvertido programa atómico.

El análisis exhaustivo de las comunicaciones entre la embajada estadounidense en Kabul y el Departamento de Estado dan cuenta de esta creciente influencia de Irán en el país vecino, que no solo se materializa en un apoyo limitado a los rebeldes talibanes --en teoría, extremistas sunís enemigos de los chiís-- sino que llega al mismo palacio presidencial de Kabul.

Un asesor cercano al jefe del Estado afgano se lo explicó en persona al actual embajador estadounidense en Kabul, Karl Eikenberry. Irán se mueve en Afganistán motivado por "una guerra de objetivos", no de simpatías religiosas". El mismo personaje admitió que Irán ayuda a algunas facciones de talibanes "a condición de que no estén afiliadas al mulá Omar". Esto contrasta con lo sucedido hace tan solo una década, cuando el régimen talibán, apoyado por Arabia Saudí y Pakistán, era enemigo acérrimo del régimen del mulá Omar. Este apoyo lo- gístico se traduce en que los rebeldes "están autorizados a cruzar la frontera" y a cobijarse en territorio iraní antes de seguir su lucha en Afganistán.

El mismo consejero de Karzai relata que ni los diplomáticos iranís se molestan en esconder este secreto a voces. "Desde hace seis meses no niegan las acusaciones, se mantienen en silencio", dijo el responsable, según un mensaje diplomático.

Al margen del papel que juega el régimen iraní en el conflicto afgano, los documentos reflejan el enorme trasiego de dinero que se mueve entre los dirigentes afganos. Por ejemplo, el vicepresidente Ahmed Zia Masud fue interceptado a comienzos del 2009 con 52 millones de dólares por los Emiratos Arabes Unidos. "Le fue permitido conservar la elevada suma sin revelar el origen del dinero ni su destino", detalla un informe secreto de la embajada de Kabul.

VINCULO DE LA HABANA Y ETA También, en otro documento filtrado y reproducido ayer por el diario The Miami Herald , Cuba ha sido tierra de acogida para terroristas de ETA y de los grupos guerrilleros colombianos ELN y FARC. Esto es al menos lo que afirma, en un informe que lleva fecha del 27 de febrero del 2009, el jefe de la misión diplomática de EEUU en La Habana, Jonhatan Farrar.