La Administración de Estados Unidos sustentó la guerra de Irak en argumentos falsos que vinculaban a Sadam Husein con Al Qaeda, mentiras que el Gobierno consiguió presionando a sus propios expertos, liderados por la Agencia Central de Inteligencia (CIA). La grave acusación ha dejado de ser teoría y desde el viernes está sustentada por los descubrimientos que ha hecho públicos el Comité de Inteligencia del Senado. Ante ese grupo, el exdirector de la CIA, George Tenet, reconoció que la Casa Blanca le presionó para que, en contra de lo que sabían sus agentes, ratificara una inexistente conexión entre el líder iraquí y Abú Musab al Zarqaui. Tenet admitió que fue "un error" haber cedido a las presiones.

"Fue algo más que un error, fue una abdicación escandalosa de sus funciones", declaró el viernes Carl Levin, uno de los senadores demócratas del comité, que asestó un duro golpe a la Casa Blanca con la presentación de dos informes. En uno de ellos se establece que la CIA repudió en octubre del año pasado la existencia de vínculos entre Sadam y Al Zarqaui. En otro, más protestado por los senadores republicanos que son mayoría en el comité, se critica a la Administración por confiar excesivamente durante el preludio de la guerra de Irak en la información que facilitaba el Congreso Nacional Iraquí, la organización en el exilio liderada por Ahmed Chalabi, que luego se pasó a Irán.

NO HABIA RELACION El informe de la CIA de octubre del 2005 estableció que el Gobierno de Sadam Husein "no tenía relación con Zarqaui y sus asociados, y ni los acogía ni hacía la vista gorda". Más aun, los expertos de la CIA habían llegado a la conclusión de que Sadam veía al dirigente de Al Qaeda más como una amenaza que como un potencial aliado, y aseguraban que los servicios de inteligencia iraquís "intentaron activamente localizar y capturar a Zarqaui y a sus asociados sin éxito".

Ese informe fue ignorado por la Administración en numerosas ocasiones. Una de las más recientes fue el 21 de agosto de este año, cuando el propio presidente, George Bush, aseguró en una rueda de prensa que "Husein tenía relaciones con Zarqaui". El nombre del terrorista --que murió en un ataque aéreo el pasado mes de junio-- fue mencionado en más de 20 ocasiones por Colin Powell en el ahora discutido discurso que el entonces secretario de Estado ofreció ante Naciones Unidas en el 2003, una intervención sobre la que se sustentó la intervención militar en Irak.

Ayer, Bush obvió en su discurso radiado semanal cualquier referencia a la polémica desatada, que hoy promete recalentarse con la intervención de destacados miembros de la Administración, incluyendo al vicepresidente, Dick Cheney, en los programas políticos de televisión.