Los palestinos han jugado a la ambigüedad para salvar el escollo del Gobierno de unidad y ahora les toca a los miembros del Cuarteto emitir su veredicto. La ONU aplaudió el acuerdo y Rusia lo valoró como "un paso hacia la estabilidad". Con más reservas, la UE lo recibió "de forma positiva pero con cautela", hasta que estudie la composición del nuevo Gobierno. Washington no se definirá hasta haber analizado el programa político, pero su portavoz anunció que el Ejecutivo de unidad tendrá que adherirse "de forma clara y creíble" a las condiciones del Cuarteto. Solo Francia lanzó fuegos artificiales al llamar a "reconocer al próximo Gobierno" y a "abrir nuevas vías de cooperación".

El documento aprobado habla de "respetar" los acuerdos previos de la OLP, pero no los hace vinculantes. No hay un reconocimiento explícito de Israel, aunque sí implícito, al apostar por la creación de un Estado en las fronteras de 1967. R. M. de F.