Una buena parte de los seis millones de habitantes que viven en Santiago de Chile se han volcado a las calles para celebrar el triunfo de la candidata socialista Michelle Bachelet en las elecciones celebradas ayer.

Bachelet ganó las elecciones presidenciales chilenas con una ventaja de más de siete puntos porcentuales sobre el derechista Sebastián Piñera, según el escrutinio oficial. Piñera reconoció su derrota y felicitó a su rival, a quien deseó "el mayor de los éxitos".

El actual presidente chileno, Ricardo Lagos, calificó la elección presidencial de "un nuevo triunfo de la democracia" y afirmó que "es un orgullo" que Chile, por primera vez, sea presidido por una mujer.

Una vida dedicada "a revertir el odio"

"Fui víctima del odio y he dedicado mi vida a revertir ese odio", afirmó Bachelet en su primer discurso en el que anunció un gobierno "para todos los chilenos y todas las chilenas".

En un discurso de 15 minutos ante medio millón de partidarios que la ovacionaban, y por momentos afónica, Bachelet prometió trabajar incansablemente por Chile, "porque no hay tiempo que perder, son sólo cuatro años".

"Quién hubiera pensado hace 20 o hace 10 o 5 años que Chile elegiría como presidenta a una mujer," se prguntó en su discurso Bachelet, que ha ganado con un 53,49% de los votos, contra un 46,50% de Piñera.